martes, 10 de julio de 2012

= IDEALIZAR =

Cortesía de Luis María Pescetti en "Ámame eternamente y vamos viendo".

¿Cómo llegamos a Idealizar?

Segunda Ley de Gainza sobre la idealización.
La impresión de lo maravillosa que es una persona es directamente proporcional al tiempo que llevamos solos.

Dicho de otra manera: lo supermaravillosafantástica que nos parezca la donna (o rapaz) que encontremos dependerá de cuánto tiempo llevamos sin alguien que nos conmueva. Y no nos referimos a alguien-súper sino a...alguien-algo. Porque hay esas épocas en las que ni siquiera estábamos con alguien ya no "bastante bien", sino que estuviera, al menos, alfabetizada emocionalmente, por decirlo de alguna manera.

Fotopinino de mantispa
...No vemos a la materia orgánica en cuestión tal como es, sino a través del cristal de nuestras ganas de lo que queríamos encontrar. Nos negamos rotundamente a sólo usar los ojos. Es más, cuando conocemos a alguien que nos impacta, los ojos es lo que menos usamos. Lo percibimos con una mezcla de memoria e imaginación inflamada.

La memoria empieza a saltar y a dar de gritos de ¡¡¡Ahi'sta!!! ¡¡¡Ahi'sta!!!, mientras la imaginación se pone como si hubiera chocado contra un camión de opio: lo gordo nos parece rellenito, lo esmirriado: estilizado, lo definitivamente descerebrado: encantadoramente simple, lo perversamente retorcido: intenso....Creando esa distancia que hay entre la realidad y los discursos de gobierno.



5 comentarios:

  1. Wooooo acá en nuestro ambiente a este conjunto de síntomas se le conoce como "El mal del monte" pues ya todos te parecen bonitos y es producto del hambre acumulada. Yo creo que es un mecanismo de la naturaleza para obligarnos a emparejarnos, mero asunto biológico jajajaja yo creo, espero.

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  2. Muy posible, y la definición de "rapaz" muy precisa.

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  3. Jajajaja. Yo creo que el mal del monte es más sencillo, es mera cuestión orgánica y biológica como dices. Pero el enamoramiento...uuuuts! Es re divertido este librito. Que hoy haya un postre rico...y saludos al postre!

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